
En la búsqueda de soluciones de fondo a la escasez de agua, se espera desarrollar una iniciativa que entregue autonomía y autogestión del vital elemento a la comunidad del sector rural Nal Alto.
En una asamblea de vecinos de la comunidad rural de Nal Alto en Ancud se realizó el pasado fin de semana el lanzamiento del proyecto “Red Comunitaria de Agua para Nal Alto”, una iniciativa ejecutada por la Asociación de Consumidores Chiloé Activo que pretende desarrollar una solución a la crisis hídrica para esa localidad mediante la construcción de una red participativa de agua.
El proyecto que es financiado por la Fundación Lepe y ejecutado por Chiloé Activo a través de su equipo de trabajo “Agua Nueva”, contempla el desarrollo de distintas etapas durante 15 meses de ejecución para lograr construir una red comunitaria de agua utilizando una vertiente del sector y capacitar a la comunidad para el cuidado, mantención y gestión del ecosistema.
Fernanda Villaroel, antropóloga, magister en gestión local del agua y directora del proyecto comentó sobre el objetivo principal de la iniciativa.
Nal Alto es uno de los sectores rurales que recibe agua con camiones aljibes por parte del municipio de Ancud, siendo la escasez hídrica una problemática que se ha ido agudizando año tras año, según lo manifestó Jorge Vargas, presidente de la junta de vecinos del sector.
Ante esta problemática, el proyecto “Red Comunitaria de Agua para Nal Alto” considera un conjunto de actividades que se iniciarán en marzo, a través de las cuales se diseñará en conjunto con la comunidad de Nal Alto una red participativa de agua, la ordenación de la cuenca desde donde se va a obtener el vital elemento y la forma en que la comunidad se hará cargo del mantenimiento y funcionamiento de esta red una vez que el proyecto haya sido ejecutado.
Rolando Rojas, ingeniero agrónomo y encargado de capacitaciones del proyecto, destacó la importancia de facilitar espacios de formación para la comunidad que permitan conocer sobre los ecosistemas en su territorio y empoderarse en su protección y cuidado.
En ese sentido, la presidenta de ChiloéActivo y coordinadora territorial del proyecto, Diela Alarcón, destacó que el rol de la comunidad organizada y participativa es gravitante para el éxito de la iniciativa.
La iniciativa cuenta con un financiamiento de $30 millones aportados por la Fundación Lepe, organización dedicada al fomento del desarrollo comunitario sostenible a lo largo de Chile, la que a través de su programa “Fondo Común” busca potenciar proyectos comunitarios que apliquen soluciones colaborativas, que tengan impacto social positivo y que promuevan el bien común, según lo planteado por Verónica Morales, directora ejecutiva de Fundación Lepe.
El proyecto que pretende beneficiar a cerca de 30 familias de Nal Alto, como también suministrar agua a la escuela y posta del sector, cuenta también con el compromiso de un aporte económico por parte de la Municipalidad de Ancud, el cual considera un monto de $12 millones para la construcción de la red, fondos que deberán ser aprobados próximamente por el Concejo Municipal.

