Las movilizaciones que se extendieron por más de 2 semanas produjeron inconvenientes en algunas obras, las que se han ido normalizando tras el término de las manifestaciones.
Las diversas manifestaciones generadas por la situación de la marea roja, y que por más de dos semanas mantuvo bloqueado el ingreso a Chiloé, llegaron a su fin el viernes recién pasado, lo que permitió que el archipiélago comience poco a poco a retomar su normalidad, principalmente en materia de abastecimiento de productos.
Precisamente el tema del abastecimiento de productos básicos era una de las principales preocupaciones para la población, pero así también la llegada de materiales de construcción y otros elementos que ante su escasez, tuvieron a muchas obras dependientes del MOP Los Lagos con problemas, las que han ido retomando su normalidad.
“Para nosotros era fundamental retomar el normal funcionamiento de las obras, ya que entendemos que cada una de ellas va en beneficio de la comunidad, por lo que la contingencia de la marea roja y los bloqueos que se produjeron, complicaron varios de nuestros trabajos, sin embargo junto a los directores regionales estamos trabajando para que todo pueda retomar su curso y sacar adelante estas obras”, señaló Carlos Contreras Seremi de Obras Públicas.
Desde la dirección de Arquitectura del MOP se señaló que las obras del Internado Femenino y Masculino de Achao, retomaron los trabajos a partir de este lunes 23 de mayo, sin embargo los casi 20 días de paralización pueden generar inconvenientes en la fecha de término del contrato. Situación similar a lo descrito anteriormente, es lo que podría pasar con el Liceo Alfredo Barría de Curaco de Vélez, que también podría sufrir retrasos.
Otra obra que vio interrumpido su proceso administrativo, fue el Hospital de Quellón, ya que el Servicio de Salud Chiloé debía firmar los planos de la obra, para el 18 de mayo publicar la licitación, lo que debió retrasarse por una semana más.
Por su parte la Dirección de Obras Portuarias (DOP) también tuvo inconvenientes en algunas obras, las que se han ido normalizando. La Rampa de Blanchard por ejemplo, que lleva un 51% de avance, tuvo que enfrentar la contingencia en la que sus trabajadores no pudieron ingresar, además de tener que sufrir por la carencia de suministros. Situación similar es la de la Rampa de Piedra Lile en Isla Laitec. En esta obra se pidió un aumento de plazo de 15 días.
En Dalcahue, la DOP desarrolla el primer proyecto del Plan de Borde Costero para la Isla de Chiloé. Esta iniciativa que tiene un 5% de avance, debió enfrentar la ausencia de sus trabajadores que no podía llegar al lugar, como así también la falta de suministros para el desarrollo de los trabajos. Es probable que también exista aumento de plazo.
En materia de agua potable rural, la Dirección de Obras Hidráulicas (DOH), también tuvo problemas tanto en sus obras ya en funcionamiento, como las que están en plena ejecución.
Muchos APR estuvieron a pocos días de quedarse sin combustible para su funcionamiento, lo que pudo haber generado una compleja situación para muchas familias del archipiélago. Precisamente fue a partir del lunes recién pasado que muchos comités de APR pudieron adquirir combustible para el funcionamiento de los sistemas, mientras otros durante el periodo de las manifestaciones decidieron racionar el combustible para enfrentar esta contingencia.
Otras obras como la Conservación de la Ribera de Cauces Naturales del Estero Matadero en Ancud debió paralizar las obras debido a la falta de hormigón, por lo que se debió entregar un aumento de plazo para esta obra.
La Dirección de Aeropuertos manifestó que durante las movilizaciones, algunos manifestantes se tomaron los aeródromos de Queilen y Pupelde, situación que generó daños en la pistas por cerca de 1.500 millones en ambos. Cabe mencionar que ambos se encuentran operativos.
Finalmente la Dirección de Vialidad también tuvo que interrumpir el normal proceso de algunas obras debido a que los trabajadores no podían llegar hasta el lugar donde se ejecutan las obras, como así también por la falta de combustible e insumos para ellas. Entre las obras que paralizaron por el periodo de la contingencia se encuentran el By Pass de Castro, las conservaciones globales de las comunas de Chiloé, la conservación del camino Piruquina – San Pedro, la conservación del cruce Guabun – Faro Corona y el mejoramiento de caminos de acceso a comunidades indígenas de Chonchi. Todas estas obras han retomado su curso, luego que se depusieran las movilizaciones al interior del archipiélago.
