Financiado por el fondo “Chile de todos y todas” del Ministerio de Desarrollo Social y ejecutado por la Corporación El Canelo, sede sur, este proyecto trabajó la asociatividad con 25 mujeres de la comuna de Ancud.
“Invernadero Comunitario: Ancud de todas y todos“ es el nombre del proyecto financiado por el fondo “Chile de Todos y Todas”, del Ministerio de Desarrollo Social y que llevó adelante la Corporación El Canelo, Sede Sur, con el apoyo del Colegio San Juan, y que impulsó el trabajo asociativo de 25 mujeres de la ciudad de Ancud, Chiloé.
La seremi de Desarrollo Social destacó esta iniciativa ya que va más allá de la ejecución de la misma “Hoy nos encontramos con un grupo de mujeres que buscan mejorar su calidad de vida, sin dejar de lado su condición de mujeres y madres, más bien reconociendo aquellas condiciones que muchas veces son consideradas como obstáculos, convirtiendo su esfuerzo en una oportunidad de desarrollo conjunto y con mirada de futuro”.
La autoridad regional recalcó además que estás 25 mujeres representan el espíritu que se impulsa con la ejecución de estos fondo concursables, “cuando el Ministerio convoca a organizaciones busca aquellas iniciativas que apuntan a grupos más vulnerables de nuestra sociedad y a su vez superar condiciones de pobreza. El esfuerzo y dedicación de este grupo de mujeres al igual de quienes tuvieron la convicción de que este enfoque era el correcto, sin duda nos hacen pensar que son estos compromisos los que debemos fortalecer”.
La iniciativa se focalizó en apoderadas del colegio San Juan que centra su quehacer en sectores vulnerables de la misma comuna y que junto a su labor educativa comparte interés por el desarrollo y condiciones materiales y humanas de sus apoderados(as).
El proyecto buscó generar autogestión productiva de alimentos “hortalizas y vegetales”, estimular estrategias asociativas y colaborativas para enfrentar necesidades y carencias económicas y transferir conocimientos técnicos y habilidades sociales que incorporen capital social a 25 mujeres jefas de hogar que enfrentar las adversas condiciones sociales y económicas a las cuales se enfrentan las familias y sectores más carentes de la comuna de Ancud.
Una variable importante a destacar del proyecto fue la de considerar el cuidado de menores hijos de las beneficiarias a cargo de personal capacitado y en el mismo recinto de capacitación, lo que permitió una alta asistencia y compromiso de ellas en la fase de capacitación.
Sobre el invernadero
El pilar central del proyecto es potenciar las habilidades de las mujeres beneficiarias, poner en valor sus conocimientos, el trabajo asociativo y su inquebrantable voluntad de superación y esfuerzo.
En lo concreto, se realizó la construcción de un invernadero comunitario de 200 m2, emplazado en el sector de Antonio Burr, en la comuna de Ancud, cuya construcción fue realizada por las propias beneficiarias –integrantes del proyecto, con el apoyo y supervisión de profesionales del área. Junto a ello, se les capacitó durante cuatro meses en áreas de: técnicas de cultivo de hortalizas bajo plástico, agroecología, desarrollo organizacional, microemprendimiento y trabajo en equipo, entre otros. También se les hizo entrega de herramientas de trabajo, ropa de trabajo e insumos para el desarrollo productivo del invernadero.
El proyecto junto con cumplir sus objetivos ha permitido generar vínculos y redes de apoyo entre mujeres que anteriormente no se conocían y que han logrado reunirse al alero de este proyecto, quienes incluso y por interés propio llegaron a constituir una agrupación productiva, la “Agrupación Hortaliceras San Juan”, que actualmente cuenta con 25 asociadas, las que esperan continuar trabajando y ampliando sus conocimientos en este ámbito productivo, una vez finalizado el programa.
