Este es un gran eslogan e idea acuñada antes de la caída de la Planta Industrial Lechera Chilolac en Ancud, Propiedad de la Cooperativa de Campesinos de nuestra Comuna, formada en los Años 70 generando un cómodo bienestar a sus asociados, idea que tiene mucho sentido, tanto en la composición organizacional de esta Planta como en la proyección de la producción, pero , a dónde va la intención de esta Crónica simplemente a extrapolar esto y el eslogan a lo que debería hacer Ancud con la Producción Agrícola y su Comercialización.
Evidentemente que el Cooperativismo es una gran herramienta de unidad de Fuerzas y esfuerzos de vecinos que deben aprender a convivir en pos de un mismo objetivo, el cual se hace juntos compartiendo lo bueno y lo malo que se encuentra en el camino y que al final se deben compartir los beneficios del esfuerzo realizado.
Este Cooperativismo también es beneficioso a la hora de ver el Capital Inicial del Negocio donde obviamente no es lo mismo un socio solo, que la suma de recursos que hacen entre varios, donde no necesariamente debe ser dinero en efectivo su aporte de capital sino que puede ser también otro tipo de propiedad que sea vinculante al Proyecto a realizar.
Dicho esto, creo que la preocupación de la Autoridad y de los entes gestores de desarrollo de nuestras comunidades debiera ir por la Línea de lo Organizacional, sobre la base de “Enseñar a Pescar y no regalar el Pescado” siendo esta forma la más eficiente a la hora de los resultados, que seguir con lo fácil del Asistencialismo , acción que atomiza a la persona acostumbrándola a una vida muy cómoda y sin esfuerzos, llegando incluso muchas veces a perder la dignidad de como se les entrega o reciben la ayuda.
Volviendo a la idea inicial siento que es válido pensar y luchar por un “Chiloé Orgánico Agrícola”, libre de los transgénicos, y Ancud principalmente declarando su interés ineludible de cultivar sano que ha sido de por vida su vocación, con logros incalculables en la salud de nuestra población.
Por esto mismo creo y pienso que hoy sin la abundancia del mar, sin minerales que poder explotar, la mirada es obligada hacia nuestra generosa tierra, que cultivando y criando a una escala comercial debemos ser capaces de explorar su comercialización en forma interna como externa, ayudados del plus de lo orgánico, y el regadío con aguas lluvias y no se debiera tener temor a entrar en cualquier nicho comercial de nuestro país.
Para esto creo que es básico tener a los vecinos organizados y produciendo para una Central de Compras donde se empacarían los productos con envases bien presentados y con un gran logo que resalte las bondades de nuestro producto, el que se despachara a cualquier parte del país.
También esta Planta o Central de Compras debiera adaptarse para instalar máquinas procesadoras de nuestra materia prima llegada de nuestros campos, y poder aplicar valor agregado a la producción : Ej. Extractos y Jugos de … Frutos y Tubérculos, Envasados de productos fritos Etc. Etc.
Hoy el Sistema permite que con un buen trabajo de Marketing y precios competitivos se pueda entrar en cualquier mercado del país, y Ancud se debe preparar para recuperar el campo y generar la ofensiva inversa de lo que nos ha sucedido sin cerrar la puerta a lo que viene de afuera sino que competir con ellos, y quiero atreverme a plantear la formula 1 x 10 que significa que no es lo mismo hacer 01 Almacigo de Zanahorias que dará una rentabilidad de $ 30.000.- a hacer 10 Almácigos que rentara $ 300.000.- Y si haces el mismo ejercicio al lado y con betarragas dará $ 600.000.- y así sucesivamente según la cantidad y variedades que se siembre será la rentabilidad, para esto es muy importante e imprescindible garantizar a nuestros Vecinos la comercialización de esta Producción.
Es por esto que inicialmente en esta Crónica he resaltado las bondades de lo que se hizo con la Producción Lechera especialmente en materia de Organización y también en la comercialización en la Planta Chilolac.
¡Ancud para Chile con nuestra Agricultura!
