Tan sólo dos de los siete camiones aljibes que durante el verano entregaron agua en distintas comunidades rurales de Ancud afectadas por el déficit hídrico están funcionando, dada la merma en la demanda por el elemento entre las familias afectadas por la sequía.
Marcela Fagerstron, una de las funcionarias municipales que ha estado trabajado en la distribución de agua a los sectores rurales, dijo que desde el mes de abril la demanda disminuyó ostensiblemente, por lo que sólo dos camiones seguirán operando durante el mes en curso. “Este mes se pidieron dos camiones a Onemi y va a ser el último mes que se va a repartir agua por el tema de la emergencia hídrica. El año pasado también se repartió hasta mayo y bajó considerablemente el nivel de entrega; el mes pasado fueron 1.875.290 litros de agua, pero con las lluvias que ha habido esto ya se comienza a regularizar”, dijo la funcionaria municipal.
Marcela Fagerstron agregó que durante este mes se seguirá entregado agua a algunas postas y escuelas, así como a comunidades puntuales que aún sufren los efectos de la sequía. “Escuela de Belbén, Cayucán, Guapilacuy, Pupelde, Lecam y postas de Coipomó, Nal, Quetalmahue y Guabún y se siguen haciendo algunas atenciones especiales en los contenedores comunitarios para los sectores de Lechagua, Quetalmahue, Nal Bajo, Pulalún, Recta Chacao, Choroihué, Lecam, Linao La Tiza; Huelden, Guapilinao, Aguas Buenas, Puntra, Colonia Degañ y Kilómetro 25”, dijo la funcionaria municipal.
Por último, señaló Marcela Fagerstron, durante el mes de mayo se analizará qué recorrido hacer con los dos camiones aljibes que aún operan en Ancud, en la lógica de que la demanda por agua debiese seguir en declive producto de las lluvias.