Con la presencia del gobernador provincial, Pedro Bahamondez, y de la directora del Servicio de Salud Chiloé, Paulina Reinoso, se realizó en Queilen una nueva asamblea ciudadana para analizar el estado de avance del proyecto de reposición del Hospital de Queilen y debatir sobre la situación de la salud de la comuna.
En la ocasión, la directora del SSCh, Paulina Reinoso, pasó revista de las medidas de reforzamiento a la salud en Queilen que se han aplicado durante la gestión de la actual administración y presentó la propuesta de convenio de programación que se tramita en el Consejo Regional de Los Lagos y que prevé un financiamiento de más $5 mil millones para el nuevo hospital de la comuna, además de recursos la reposición de postas rurales.
Reinoso apuntó en que la clave está en crear un nuevo modelo de salud centrado en la comuna, que supere las barreras entre la administración de centros de salud dependientes del municipio y los que pertenecen a la red asistencial del Ministerio de Salud.
El Hospital y su emplazamiento
En tanto, un vivo debate despertó el análisis del avance de proyecto del nuevo Hospital Comunitario de Queilen. Uno de los puntos que más interés generó, fue el del terreno en que estará emplazado el recinto. Especialistas del Servicio explicaron a los asistentes que, por recomendación de la Seremi de Salud, era necesario incorporar nuevas alternativas. El predio que se había estudiado previamente como un posible sitio para el hospital, está ubicado a menos de 300 metros de una planta de aguas servidas, lo que pone en duda una futura aprobación sanitaria del establecimiento, debido al peligro de malos olores, focos de roedores y otros riesgos a la salud. Los funcionarios del departamento de Recursos Físicos del Servicio de Salud Chiloé informaron que ya se han identificado otras opciones que cumplirían los requisitos técnicos y administrativos para una operación segura del nuevo establecimiento de salud.
Varios participantes del diálogo expresaron su preocupación de que un cambio del terreno provocaría un retraso o incluso la anulación del proyecto. La directora del Servicio Salud, Paulina Reinoso, explicó que la determinación del sitio es sólo uno de los puntos que se deben resolver para materializar el proyecto y que se sigue trabajando en las demás materias, por lo que los plazos se mantendrán. Al mismo tiempo, fue enfática en declarar que “nosotros hemos fijado una línea: tenemos que hacer las cosas bien, sin improvisar y sin hacer promesas que después no podremos cumplir, frustrando las expectativas de la ciudadanía”. Reinoso explicó que, por lo pronto, la recomendación de la autoridad sanitaria no puede ser obviada, pues será uno de los antecedentes que considerará el Ministerio de Desarrollo Social antes de dar su autorización técnica para que el proyecto de se realice. Insistió en la voluntad de sacar adelante el proyecyo, de la mejor manera. “Estamos de acuerdo todos que hay que cumplir con la normativa. Por muchas ganas que las cosas sean en un lugar, aquí nos regimos por marcos normativos sanitarios y administrativos, y sobre eso vamos a actuar”, declaró.
Reinoso insistió en que, por encima de los intereses privados, debe prevalecer el objetivo de contar un nuevo hospital para los queilinos, y que hacia allá apuntan todos los esfuerzos de los equipos del Servicio de Salud porque se reconoce la importancia de este recinto para la comunidad.
La presidenta del Consejo Consultivo del hospital, Marisol Ramírez señaló que “vamos a juntarnos y vamos a ir a medir el terreno y vamos a ver si realmente cumple con la cantidad de metros establecidos. Y vamos a esperar. La comunidad está atenta, está alerta. Queremos un hospital nuevo; no es por capricho, sino que realmente lo necesitamos.”
Otros de los acuerdos adoptados, fue la programación de un taller, a cargo de especialistas del SSCh, con dirigentes sociales sobre los requerimientos técnicos y administrativos en la proyección de nuevos recintos asistenciales, de modo de mejorar la participación activa de la comunidad en estos procesos.
El gobernador provincial, Pedro Bahamondez, en tanto, valoró el diálogo sostenido: “lo más importante es destacar este espacio de conversación con la comunidad, en el sentido de ir aclarando dudas, de manejar la misma información y, también, en este caso, ir resolviendo problemas de forma conjunta”.
