A cuatro meses de la entrega de las 138 viviendas que hoy componen la Villa Rosaura de Ancud, el Ministerio de Vivienda y Urbanismo realiza las últimas inspecciones antes de entregar otras 80 nuevas casas en el mismo sector de Alto Caracoles. Se trata de un proyecto habitacional construido a un costado de calle Caicumeo para 80 familias que integran el comité habitacional “Luchemos por una Vivienda”, por un costo total de $1.505.250.000.
Durante un recorrido por las obras, el secretario regional ministerial del ramo, Eduardo Carmona, destacó la calidad de los trabajos que superan el 85% de avance, añadiendo que, a partir de lo visto y lo informado por la constructora Bedecarratz Limitada, las obras terminarían un mes antes de lo planificado, vale decir el próximo mes de septiembre.
“Lo más importante es que estas viviendas son reflejo de la política habitacional que la Presidenta Michelle Bachelet está buscando, con viviendas más integradas, con pertinencia, con espacios públicos adecuados y con la participación de las familias”, indicó el seremi.
Esta apreciación fue compartida por Patricio Vargas, presidente del comité favorecido, quien destacó las características de este proyecto, señalando que “las viviendas tienen buenas terminaciones, son térmicas, tienen buenos sumideros de aguas, están en buenos terrenos y sus accesos son espectaculares”.
Por su parte, la alcaldesa de Ancud, Soledad Moreno, se mostró satisfecha por el avance de esta nueva iniciativa habitacional para su comuna, que fue patrocinado por la Oficina Municipal de Vivienda, destacando el colorido y el diseño de las casas, así como la pronta entrega de la nueva villa. “Muy contenta porque las obras están muy avanzadas y feliz porque es tan importante para una familia acceder a una casas propia después de tanta espera”, sentenció la jefa comunal.
Las nuevas casas son de dos pisos, tienen una superficie promedio de 46 metros cuadrados y darán vida a la “Villa Volcanes”, que viene a completar un proceso iniciado en el año 2013 cuando las familias postularon colectivamente a un llamado regular del Fondo Solidario de Elección de Vivienda, adjudicándose luego los respectivos subsidios estatales.
